Reflejos de nuestra vida nómada familiar
¿Cuando fue la ultima vez que te levantaste diciendo "es el momento para cumplir sueños"? ¿cuanto tiempo le dedicamos a lo que de verdad nos llena por dentro?, ¿cuantas noches te acuestas diciendo "ya queda menos para que lleguen las vacaciones de..."?, Años, meses, días, horas,... pasamos esperando a que llegue el momento perfecto y cuando nos queremos dar cuenta, tan rápido como vino se fue.
Hoy queremos escribir algo especial, algo que nos sale desde lo mas adentro, algo de lo que muchas veces hemos hablado y hablamos en la actualidad:
Vivimos dentro de un circulo vicioso en el que pasamos la vida buscando "lo mejor", el mejor coche, la mejor casa, el mejor empleo, ... y cuando parece que te estas acercando a conseguir "lo mejor", rápidamente aparecen mas "cosas" (normalmente suelen ser objetos) que nos vuelven a hacer girar y girar perdiendo el norte.
Cuando finalizamos nuestros estudios, luchábamos por "el mejor" puesto de lo "nuestro", claro, para qué si no estudiar tanto, tantísimas horas si no es para conseguir el mejor empleo. Cuando tienes empleo y con ello un sueldo, se abre la puerta de la ambición, el poder adquisitivo y buscas comprar ese coche que tanto tenias ganas de conducir; esa gran casa, donde refugiarte y sentirte a gusto, decorándola a la ultima, ... y vuelves a girar y girar como una peonza sin control.
Mas tarde, llega tu bebe, esa cosita preciosa que te hace babear hasta las largas rachas de insomnio. Y claro esta, quieres que esa criaturita tenga también "lo mejor". Y la rueda sigue rodando y rodando por que no le falte de nada: ropita, un cuarto nuevo, juguetes, CDs infantiles, una silla de paseo, " todo que sea de lo mejor",...
Pero un día, sin darte cuenta decides parar el tiempo, parar ese ritmo frenético que te lleva a pasar mucho tiempo fuera de casa, fuera de tus seres queridos, lejos de tener tiempo para hacer actividades que te hacen sentirte bien, para conseguir el mejor empleo, el mayor sueldo, en resumen, el menor tiempo haciendo lo que de verdad deseas. Es así, como comenzó todo. Dos loc@s soñadores dentro de una rueda cual hamster dando vueltas a quien sabe donde. Dejamos nuestros sueños aparcados, nuestra ilusión por viajar, por conocer sitios desconocidos, por conocer gente de todo el mundo, todo, por conseguir "lo mejor". Sin embargo, hay veces que es necesario un cambio trágico para saber de verdad qué es lo que quieres o si "lo mejor" es lo que hasta el momento estabas haciendo.
Antes de que nuestra pequeña nómada naciera, de una manera u otra saciábamos nuestro espíritu aventurero con esas pequeñas dosis de tiempo libre llamadas vacaciones. Dentro de lo posible salíamos, viajábamos. Después, con la llegada de la pequeña, esas pequeñas vías de escape, eran menores y el numero de horas en el trabajo aun mayores, "cómo decir que no a una subida de sueldo, reflejo de una subida de horas de trabajo, claro esta". Ahora había una mas en la familia, no podíamos andarnos con juegos de niñ@s.
Así, haciendo desaparecer a nuestro niñ@ interior para ver crecer a nuestra niña, qué contradictorio nos pareció.
Y en todo ese tiempo, aun sin darnos cuenta, estaba naciendo un ciclón dentro de nosotr@s que nos llevaría a dar un cambio de 360 grados en nuestras vidas. Comenzamos a dudar si nuestra pequeña necesitaba tantas "cosas" o por el contrario necesitaba mas tiempo en familia; si sería más feliz por tener mucho "de todo" o el mayor numero de recuerdos de vivencias junto a nosotr@s. Un cambio de perspectiva que necesitaría ser pensado, trabajado y puesto en marcha. No lo dudamos y nos pusimos a recuperar a nuestros niñ@s interiores para que ell@s nos dieran ese valor que la vida adulta nos había quitado.
"Porque un@ niñ@ no entiende de miedos, no entiende de imposibles; un@ niñ@ sabe qué quiere, tiene la valentía suficiente para intentarlo y depende de su entorno que le facilite el logro". Una lección de vida que nos dan nuestr@s pequeñ@s, cuando detienes el tiempo por un instante, das valor a sus palabras, ell@s pueden darte sabios consejos.
Y fue así como empezamos a ver, que "lo mejor" es muy subjetivo, y que para nosotr@s lo mejor no esta en las cosas sino en las vivencias que mas adelante son convertido en recuerdos. Desde mayo del 2017 estamos sin una "casa", sin sueldos, ni mucho poder adquisitivo.
Pero desde mayo del 2017 hasta hoy, tenemos la sensación de estar viviendo los días y no ver cómo los días se pasan y no los vivimos como a nosotr@s nos gustaría. Nadie dijo que fuese a ser fácil, porque fácil no es que sea, hay días que se complican y mucho, pero hasta en esos momentos, nos sentimos afortunad@s de haber dado el salto. No es fácil llevar una vida nómada sin tampoco tener una fuente de ingresos constante, aunque sea una mínima entrada, al fin y al cabo hasta para cubrir nuestras necesidades primarias necesitamos dinero NOS GUSTE O NO. Todavía no hemos conseguido dar con el equilibrio, pero por el camino vamos aprendiendo y seguimos buscando la manera de continuar. Hemos sido músicos callejeros, vendedores ambulantes, limpiadores, bloggers, agricultores ... Y por esos trabajos puntuales, hemos dado un respiro a las cuentas bancarias que cada día bajan y bajan. Pero nos propusimos por lo menos un año de nuestras vidas dedicarlo a vivir un sueño y seguiremos siendo lo que el camino nos valla dando la oportunidad de ser para cubrir necesidades.
Lo que si que queremos ser y seguir siendo es BUSCADORES DE HISTORIAS, vivir momentos, conocer gente y que ell@s nos cuenten sus aventuras para después, compartir las nuestras.
Queremos que nuestra pequeña crezca sabiendo que si quiere algo debe intentarlo, luchar por conseguirlo. Que soñar es bonito pero aun lo es mas salir a cumplir ese sueño; que no tenga barreras o no seamos nosotr@s quienes se las pongamos.
Quizá estemos en la cuenta atrás de este bonito proyecto-familia llamado sueño, o quizá solamente acabe de empezar, pero sea como fuere, la experiencia vivida no desaparecerá de nuestras mentes y corazones. Puede que en unos meses volvamos a nuestras vidas cotidianas y aun así, seamos felices en ellas; porque la vida da muchas vueltas y lo bonito es hacer lo que de verdad sientes en cada momento.
